Mikado - Difusores de aroma

Los mikados liberan el aroma poco a poco gracias a sus varillas de fibra o ratán, que absorben la fragancia y la difunden en el aire. Es una forma sencilla de mantener el ambiente perfumado durante todo el día, sin necesidad de electricidad ni fuego.

Puedes ubicarlos en cualquier espacio interior, como el dormitorio, el baño o el living comedor. Lo ideal es ponerlos en lugares con buena ventilación y lejos de corrientes fuertes de aire para que la fragancia se distribuya de manera uniforme y constante.

La duración varía según el tamaño del envase y las condiciones del entorno. En promedio, un difusor de aromas puede durar entre 4 y 6 semanas. Si el ambiente es cálido o hay corrientes de aire, la fragancia puede evaporarse más rápido.

Una forma práctica de renovar el aroma del mikado es girar las varillas cada pocos días. Así, las fibras se impregnan de nuevo con la fragancia y el aroma se mantiene más fresco y perceptible en el ambiente.

Para dormitorios o zonas de descanso, elige aromas de mikado suaves como lavanda o vainilla. En áreas comunes, los aromas cítricos y fragancias frescas aportan energía y sensación de limpieza. Cada espacio puede tener su propio carácter olfativo.

Evita colocarlo cerca de ventanas abiertas o fuentes de calor, ya que el líquido se evapora con mayor rapidez. Además, mantén las varillas limpias y cámbialas cuando notes que ya no difunden con la misma intensidad.

Sí, puedes hacerlo. Cuando el líquido se termine, basta con recargar el envase con un aromatizador de varillas y reemplazar las varillas por unas nuevas. Así prolongas la vida del producto y continúas disfrutando de su fragancia.